Tú no eres especial. Yo no soy especial. Nadie es especial. ¿Qué es esto? ¿Un mensaje para consolarte? No. Es más bien una invitación a que te levantes de esa silla o ese sofá y empieces a mover el culo en la dirección de tus sueños. Si nadie es especial, quiere decir que puedes conseguir aquello que tus ídolos consiguen.
No hay personas mejores que otras, simplemente hay personas con unos hábitos de vida distintos. Para ser como las personas que admiras, adopta su mentalidad, disciplina, rituales y hábitos ganadores. Si otro puede, tú también puedes adoptando su mentalidad. ¿Qué hábitos han hecho a esta persona llegar hasta dónde está? ¿Cómo puedo adaptarlo a mi vida? Suprime tu ego y tus escusas, y fúndete con la mentalidad de los triunfadores, la gente optimista que hace avanzar el mundo.
Lo que nos diferencian son nuestros hábitos.